Por: Celia Martínez
Fue una alegre ocasión, el sábado pasado, cuando el Padre José Landaverde y sus feligreses celebraron el quinto aniversario de la Misión Anglicana Católica Nuestra Señora de Guadalupe. La celebración comenzó en la tarde con una misa en la iglesia y los feligreses se unieron después al Padre Landaverde para una comida y baile en el restaurant de Berwyn, La Quinta de los Reyes. “Esto es para anunciar, con gran felicidad, los cinco años de la misión”, dijo el Padre Landaverde.
Entre los asistentes estuvieron los Hermanos Arroyo, Lorenzo y Elfego y Jorge Mariscal, de 23 años de edad, quien semanas antes, junto con el Padre Landaverde llevó a cabo una huelga de hambre paraponer presión a loshospitales de Chicago que se habíannegado a darles tratamiento y a colocarlos en la lista de espera de Trasplante de Organos, debido a su estado de inmigrantes indocumentados.
En las dos semanas de duración de la huelga de hambre, Landaverde recibió numerosas amenazas de muerte en forma de cartas y el y cinco otros terminaron en el hospital debido a malnutrición. Sin embargo, ninguno de estos esfuerzos fueron en vano, ya que el CEO del Centro Médico de la Universidad de Illinois, Joe García, decidió reunirse con el Padre Landaverde y revisar el caso de Lorenzo Arroyo y el Centro Médico de la Universidad Rush, aceptó colocar a Elfego Arroyo en la lista de espera de transplante de órganos.
“Han cumplido su promesa”, dijo Lorenzo Arroyo refiriéndose a los hospitales. “Pronto comenzarán mi proceso de evaluación y mi hermano ya está en la lista de espera”.