¿Le preocupa el peligro de tener cáncer de mama? Si usted es una mujer menor de 45 años tal vez no tenga que preocuparse todavía. Nuevas guías para los mamogramas, publicadas recientemente por la Sociedad Estadounidense del Cáncer (ACS), dieron un paso atrás a las regulaciones de pruebas agresivas universales instituídas en estados Unidos hace casi dos décadas. Reporta el Washington Post.
Los mamogramas son rayos X del pecho utilizados para señalar irregularidades en el tejido del seno. Por años, estas pruebas fueron acreditadas con haber salvado la vida a millones de personas ayudando a los doctores a detectar cánceres en sus etapas más tempranas. Pero un creciente cuerpo de investigación sugiere ahora que estos medios de diagnóstico se usan más de la cuenta en la comunidad médica, haciendo que muchas mujeres sean tratadas de más o diagnosticadas incorrectamente por tumores benignos o inclusive no existentes. En el pasado, ACS recomendaba que la mujer se hiciera una prueba anual del cáncer de mama a la edad de 40 años, como medida preventiva. Ahora, estos expertos están pidiendo a la mujer que no se hagan un mamograma hasta la edad de 45 años y que después se hagan una prueba del cáncer cada dos años, a partir de los 55 años.
“Están diciendo que se dieron cuenta de que ahora necesitan evaluar el balance de beneficios y daños a cada individuo cuando están tomando una decisión en quien hacer la prueba”, dijo Nancy Keatin, MD, doctora en medicina interna y cuidados primarios en Brigham and Women’s Hospital, quien escribió una editorial en JAMA acompañando las nuevas guías. “Ya no es tan sencillo decir que todos necesitan un mamograma”. Los expertos hacen notar que estas nuevas directrices solo aplican a las mujeres que no tienen factores de riesgo específicos para el cáncer de mama, como historial familiar de la enfermedad o las mutaciones de genes BRCA1 o BRCA2 que predisponen a la mujer a desarrollar la enfermedad.