El Ministro de Salud Brasileño, Ricardo Barros, inauguró el martes un centro de control que atenderá problemas y emergencias de salud durante los Juegos Olímpicos del Verano y los Juegos Paralímpicos. El Centro Integrated Joint Health Operations Center o CIOCS, en Río de Janeiro, prestará servicio las 24 horas, con un personal de 125 profesionales, enfocados exclusivamente en coordinar el trabajo del personal de cuidado de salud. CIOCS, entre otras funciones, vigilará y coordinará las situaciones de alto riesgo, atención de salud regular, esfuerzos sanitarios y epidemiológicos y respuestas a emergencias de salud del público. El nuevo centro está diseñado para ofrecer “la más efectiva vigilancia de salud posible durante los Juegos y para estar listo para responder tan pronto sea posible en cualquier situación”, dijo Barros. CIOCS estará administrado desde el Centro de Operaciones de Río de Janeiro y está programado para operar en todas sus funciones el 29 de julio, una semana antes de la apertura de los Juegos Olímpicos. El centro permanecerá abierto hasta el 26 de septiembre, ocho días después de que terminen los Juegos Paralímpicos.
Las ciudades de Brasilia, Sao Paulo, Belo Horizonte, Salvador y Manaus, donde se jugará el sóccer olímpico, operarán bajo el mismo sistema de control utilizado en Brasil desde el 2011 para grandes eventos, como la Copa Mundial de Sóccer del 2014 y el Día Mundial de la Juventud el 2013. Los organizadores olímpicos esperan que en las competencias se atiendan el 90 por ciento de las necesidades médicas. En caso de accidentes con víctimas múltiples, la ciudad de Río de Janeiro tiene una reserva de 235 camas de hospital, de las cuales 135 está en hospitales federales, 50 en hospitales municipales y 50 en hospitales estatales. Para la duración de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, Brasil ha contratado 2,500 profesionales de salud adicionales y 3,500 contratistas, quienes realizarán inspecciones y eliminarán vectores de peligro del virus del dengue. El Ministerio de Salud ha invertido 72 millones de reales ($22 millones de dólares) en la adquisición y mantenimiento de 146 nuevas ambulancias, para responder a cualquier emergencia durante la competencia.