Cuando Jodi entró a la clase ese día, la estudiante notó un gran círculo de kioskos a lo largo del patio principal del campus. Entre los kioskos álguien regalaba camisetas con la mascota de la escuela. Todo lo que Jody tenía que hacer para conseguir una era llenar una forma. Como un bono recibiría una tarjetita de plástico que prácticamente era dinero gratis. O así pensó ella. Cuatro años más tarde se encontró con una camiseta de $5,000 gracias a la deuda en que se metió. Los niños que aprenden la importancia del ahorro a edad temprana están mucho mejor preparados para manejar su dinero de forma independiente, una vez que crecen”, dice Eric Hutchinson, planeador financiero certificado y autor del libro “The Financial Briefing”. Los padres de Jody nunca le hablaron de su deuda. O de como podría haber comprado una camiseta similar con dinero en efectivo, habiendo guardado una cantidad similar en un fondo de emergencia y estar libre de deudas financieras cuando se graduara. En vez de eso, Jody se unió al graduado de colegio promedio de Estados Unidos que sale de la escuela con una deuda de más de $5,600 en tarjetas de crédito. Hutchinson recomienda que los niños comiencen a hacer un fondo de emergencia tan pronto como ahorren algún dinero y entiendan los principios del ahorro y crear una cuenta de emergencia para cuando sean jóvenes adultos. A continuación siete formas de ayudar a su hijo a desarrollar un fondo de emergencia de por vida:

Anime a los niños a hacer algo. Ya sea un niño de 10 años que guarde un dólar o un adolescente abriendo una cuenta de cheques o ahorros, haga que los niños tengan el hábito del ahorro no importa cuan pequeña sea la cantidad.

Ayude a los niños a tener un balance con gustos y sacrificios. Ayude a sus niños fijando y alcanzando metas. Una vez que alcancen esas metas permítales un pequeño retiro para que se compren algo para ellos.

Las monedas van al fondo de emergencia. Las monedas sueltas suman, no deje que los niños desprecien esos centavos o los dejen si se caen en el estacionamiento – haga que los recojan y los agreguen al fondo.

Sea un ejemplo. A los niños no se les va nada y si no ven que usted ahorra se preguntarán porqué tienen que ahorrar ellos.

Mantenga a los niños lejos del crédito tanto como sea posible. Las compañías de tarjetas de crédito tienen grandes presupuestos de mercadeo y muchos de esos fondos se gastan en mercadeo para adolescentes mayores. Asegúrese de que su hijo comprende el peligro que significa una tarjeta de crédito.

Programe juntas financieras. Reúnase con su hijo a intervalos regulares para que pueda discutir sus cuentas de emergencia, responder sus preguntas y discutir los problemas de dinero que pueda estar enfrentando.

Ayude a su hijo a hacer un presupuesto real. Mientras más pronto aprendan los niños a manejar un presupuesto, más fácil les será todo más adelante. Los niños más pequeños pueden empezar anotando su más y menos en un papel, mientras los niños mayores pueden aprender sobre presupuestos en software y aplicaciones.

Erick Hutchinson (http://erichutchinsonfinancial.com) es planeador financiero certificado con más de 30 años de experiencia en planeación financiera, inversiones, herencias e impuestos.