Por: Ashmar Mandou
El Senador de E.U., Dick Durbin (D-IL) discutió el lunes, en Harold Washington Community College, el Acta Dream del 2017, medida bipartisana que daría a los jóvenes inmigrantes – conocidos más comunmente como Soñadores – la oportunidad de obtener la residencia permanente y la ciudadanía. A Durbin se unieron los Soñadores, mismos que compartieron sus historias personales en una conferencia de prensa en Harold Washington Community College. “Fue hace 16 años – en el 2011 – que presenté primero el Acta Dream, para dar a los estudiantes indocumentados que crecieron en este país, la oportunidad de obtener su ciudadanía”, dijo Durbin. “No se ha convertido en ley, pero el Acta Dream ha producido un movimiento de cientos de miles de jóvenes inmigrantes de todo este país. Ellos vinieron a Estados Unidos cuando niños. son estadounidenses en todos los conceptos, excepto por su estado de inmigración. Van a la escuela con nuestros niños y están correspondiendo a sus comunidades como maestros, enfermeros, ingenieros y soldados – sin embargo están en riesgo de deportación a países que apenas conocen. Yo voy a hacer todo lo que esté en mi poder como Senador de Estados Unidos para proteger a estos Soñadores y darles la oportunidad de convertirse en ciudadanos estadounidenses, para que puedan contribuir a un futuro más brillante para todos los estadounidenses”. El Acta Dream, que Durbin presentó la semana pasada con el Sen. de E.U. Lindsey Graham (R-SC), permitiría que estos jóvenes obtengan la residencia permanente legal y eventualmente la ciudadanía estadounidense si ellos:
- Han sido residentes por mucho tiempo de E.U. y vinieron cuando niños;
- Se gradúan de la secundaria u obtienen un GED;
- Siguen una educación superior, trabajan dentro de la ley por lo menos tres años o sirven en el ejército.
- Aprueban las revisiones de seguridad y el cumplimiento de la ley y pagan una cuota razonable de solicitud;
- Demuestran habilidad en el inglés y conocimiento en la historia de Estados Unidos; y
- No han cometido una felonía ni otros crímenes graves y no suponen una amenaza para nuestro país.