Mucho de las discusiones sobre educación se enfoca en los años de kindergarten al 12º, pero algunos expertos en educación de niñez temprana sugieren que un aprendizaje serio puede empezar aún más temprano y dar dividendos para los años por venir de los niños. “Los niños pequeños tienen la capacidad a una edad muy temprana de ser retados académicamente y necesitamos educarlos fuertemente durante esos años en lugar de esperar hasta que sean mayores,” dijo Alise McGregor, fundadora de los Pequeños Newtons (www.litllenewtons.com), un centro de educación temprana con localidades en Minnesota e Illinois. Un estudio reciente confirma que los primeros cinco años de vida son particularmente importantes para el desarrollo de cerebro infantil. El Centro de la Universidad de Harvard para el Desarrollo del Niño reporta que, en los primeros años, más de un millón de nuevas conexiones neurales se forma cada segundo, construyendo la arquitectura del cerebro. McGregor sugiere cinco razones por las cuales los padres debieran considerar acelerar la educación de sus niños pre kindergarten:

• Socialización. La socialización con otras personas además de la familia del niño en un ambiente seguro es un elemento esencial fundamental. “Es importante introducir a nuestros hijos con otros niños y apoyar su transición a los sus propios grupos de amigos y cuanto antes hagamos esto, les ayuda a los niños a superar la timidez y a obtener confianza en sí mismos,” dice McGregor.

• Experiencia Personales. Estas ayudan al desarrollo organizacional del cerebro y su funcionamiento en muchas situaciones, ayudando a los niños a desarrollar habilidades de aprendizaje, así como habilidades sociales y emocionales. “Un buen centro de educación temprana crea un ambiente donde la imaginación, el amor y la novedad se unen para una aventura diaria,” dice McGregor.

• Entusiasmo por el Aprendizaje. Las lecciones deben dares en una forma divertida y estimulante que aliente a los niños a ser estudiantes efectivos. “Sentirse inspirado y estimulado para aprender echa raíces en la preescolar,” dice McGregor, “y puede ser para toda la vida.”

• Aprender respeto por los demás. Un bloque importante para construir la felicidad, amistas y éxito en la vida empieza aprendiendo cómo compartir, cooperar, tomar su turno y ser amable. “Al llevar conversaciones, seguir las reglas, escuchar, aceptar las consecuencias de sus acciones, el niño aprende temprano cómo empezar a llevarse con el mundo,” dice McGregor.

• Resistencia. Es importante que los educadores de la niñez temprana y los padres trabajen juntos para desarrollar Resistencia en los niños lo antes posible. “Al crear un ambiente consistente y estable con expectativas claras y consecuencias predecibles, los niños pueden desarrollar habilidades en la administración de sí mismos y sus emociones,” dice McGregor. “Ellos pueden experimentar obstáculos, raspones o la pérdida en un juego, pero esto es la base para construir estrategias para soportar los retos más grandes en la vida.”