El Procurador General Kwame Raoul lideró una coalición de 24 fiscales generales para presentar un informe amicus curiae para proteger una disposición clave de la Ley de Protección al Paciente y Creencia Asequible (ACA, por sus siglas en inglés) que garantiza el acceso a la atención preventiva crítica para millones de estadounidenses. El Congreso promulgó la provisión de servicios preventivos de ACA porque, anteriormente, muchos estadounidenses tenían dificultades para pagar la atención preventiva, que puede salvarles la vida pero que a menudo no estaba cubierta por el seguro. La provisión de servicios preventivos eliminó esta barrera financiera requiriendo que la mayoría de planes de seguro privados cubrieran ciertos servicios y tratamientos preventivos, como las pruebas y vacunas contra el cáncer, sin cargar costos extra, incluyendo copagos o deducibles. La provisión enfrenta un reto legal en Braidwood v. Becerra, registrado por varios individuos y empleadores que quieren comprar u ofrecer seguros de salud que no cubran ciertos servicios preventivos, la mayoría, notablemente, cuidado anticonceptivo y cuidado profiláctico para el VIH. Alegan que estos requisitos deberían ser eliminados por varias razones, incluyendo que violan los derechos del individuo bajo el Acta de Restauración de Libertad Religiosa (RFRA) y que el proceso para determinar cuales servicios están cubiertos bajo la provisión viola la Cláusula de Nombramientos de la Constitución de los Estados Unidos. Raoul y la coalición presentaron su escrito en apoyo del gobierno federal en el 5° Circuito, que está resolviendo las apelaciones del gobierno federal y los demandantes tras la decisión del tribunal de distrito. El escrito señala que muchos estadounidenses han llegado a confiar en el acceso a la atención médica sin costo proporcionado por la disposición. Dentro de los cuatro años posteriores a la aprobación de la ACA, aproximadamente 76 millones de estadounidenses obtuvieron una cobertura ampliada a uno o más servicios preventivos. A partir del 2020, aproximadamente 151,6 millones de personas estaban inscritas en planes de seguros privados que cubren servicios preventivos sin costo para el paciente.