La Comisionada del Condado de Cook, Donna Miller, convocó una audiencia en junio del Comité de la Junta de Salud y Hospitales del Condado de Cook para oir de partes interesadas sobre la forma en que los residentes de Illinois pueden protegerse mejor durante y después del embarazo y el parto. En abril, la Comisionada Miller encabezó una resolución pidiendo la audiencia, después que reportes mostraron que en el 2020, Illinois tuvo un índice de mortalidad maternal de 23 muertes por 100,000 nacimientos vivos y para las mujeres afroamericanas, el índice fue seis veces más alto, – sobrepasando el promedio nacional. “Más de ocho de cada diez muertes maternales son prevenibles y el hecho de que no estamos haciendo todo lo posible por evitarlas es inaceptable”, dijo la Comisionada del Condado de Cook, Donna Miller. “Agradezco a todos los que hablaron en la audiencia de hoy para ayudarnos a entender como podemos atender este crucial problema en el condado, el estado y a niveles federales”. Durante la audiencia, la junta escuchó a legisladores, simpatizantes y profesionales médicos sobre lo que el estado necesita hacer para más adelante prevenir las muertes relacionadas con el embarazo y el parto. La audiencia presentó el testimonio de la Congresista Robin Kelly, la Rep.Estatal Mary Flowers, la COO del Departamento de Salud Pública del Condado de Cook, Dr. LaMar Hasbrouch, la Defensora y Vicepresidenta y Funcionaria de Enfermeras en del Hospital Trinity, Gwendolyn Oglesby-Odom, la Dra. Nicole Williams del Instituto de Ginecología de Chicago, la Dra. Lisa Green de Family Christian Health Center y otros. De acuerdo a los Institutos Nacionales de Salud, aproximadamente 700 mujeres mueren en E.U. cada año como resultado de complicaciones del embarazo o el parto, con un mayor número de muertes en mujeres de color comparado con las mujeres blancas. E.U. tiene uno de los más altos índices de mortalidad maternal en el mundo desarrollado.