Por Ashmar Mandou
El lunes, 21 de abril, el Representante Jesús “Chuy” García (IL-04) sostuvo una conferencia de prensa fuera de la Plaza Federal, junto a oficiales electos de la localidad, AFGE National, Social Security Works y líderes comunitarios. Juntos hablaron contra el plan de la Administración Trump de cortar miles de empleos de la Administración del Seguro Social (SSA) y eliminar los servicios en español, movimiento que impactaría gravemente a los trabajadores federales, las personas mayores, las personas discapacitadas y los inmigrantes hispano-parlantes del 4º Distrito Congresional, dijo el Congresista García. “El Seguro Social no es un regalo – es algo pagado y ganado. Pero en este momento, la administración de Trump está recortando empleos, cerrando servicios y atacando a las comunidades inmigrantes. Esto no es ahorrar el dinero a los estadounidenses – es hacer más rico al que ya es rico. Estamos aquí para hablar claro: No Intervengan con el Seguro Social. Eliminar los servicios en español es más que una mala política – es una crisis de derechos civiles. No permitiremos que lo desmantelen sin luchar”, dijo el Congresista García.
En la Plaza Federal, el Rep. Jesús “Chuy” García criticó la administración del Presidente Donald Trump de eliminar a miles de trabajadores de la Administración del Seguro Social, lo que podría potencialmente llevar a cortar la mitad de todo el personal de la agencia. Esto llega después del cierre de 47 oficinas del Seguro Social en el país, incluyendo 26 este mes. Ninguna oficina en Illinois ha sido cerrada. El gobierno federal recientemente clasificó más de 6,000 inmigrantes vivos como muertos y canceló su número de Seguro Social lo que significa que no pueden obtener legalmente un empleo, cobrar beneficios del Seguro Social o recibir ciertos beneficios gubernamentales. Esto hace también más difícil abrir cuentas bancarias o inscribir a sus hijos en las escuelas. “El Seguro Social es un salvavidas indispensable para gente discapacitada, muchas de las cuales viven en la pobreza por su discapacidad. Hay más de 11 millones de estadounidenses discapacitados menores de 65 años que confían en los beneficios de la Administración del Seguro Social. Cuando una oficina local es cerrada, el número de personas que reciben beneficios por discapacidad baja cerca de un 16 por ciento. Esto corta a la familias de un apoyo financiero indispensable”, dijo Michelle García, Gerente de Organización y Desarrollo Comunitario en Access Living.
“Para nuestras personas mayores, el Seguro Social no es dinero extra. Es con lo que pagan su renta, compran su comida, cubren sus recetas y mantienen la luz en su hogar. Un cheque que se retrasa o se pierde puede poner su vida completa en crisis. Tenemos la responsabilidad de proteger la dignidad de nuestros ciudadanos mayores. No vamos a esperar que esta crisis empeore. Estamos levantando nuestra voz ahora porque nuestros ciudadanos mayores no pueden permitirse el lujo de ser ignorados”, agregó Richard Juárez, Director Ejecutivo de Solutions for Care.
Crédito Fotográfico: Oficina del Representante Jesús “Chuy” García