Por Ashmar Mandou
Alarmantes preguntas y preocupaciones continúan surgiendo tras la muerte del niño migrante de 5 años, Jean Carlos Martínez Rivero y las enfermedades reportadas en otros niños que viven en un almacén de Pilsen en la Cermak Road y Halsted St. Martínez era residente de un albergue donde sufrió una emergencia médica y fue transportado a ComerChildren’s Hospital el domingo, donde fue declarado muerto.
“Estamos tristes por la trágica muerte del niño de 5 años Jean Carlos Martínez, quien vivía en el albergue temporal del 2241 S. Halsted St.. Los reportes iniciales indican que el niño sufrió una emergencia médica y murió poco después de llegar a Comer Children’s Hospital. Funcionarios de la Ciudad están brindando apoyo a la familia y están aún reuniendo información sobre esta tragedia”, dijo el Alcalde Brandon Johnson en una declaración a los medios. “Mi corazón y mis oraciones están con la familia Martínez. La Ciudad les continuará brindando recursos y apoyo en estos momentos tan difíciles”.
Activistas comunitarios, tanto como profesionales médicos, hicieron oir su preocupación los meses pasados sobre los numerosos problemas de salud que enfrentan los nuevos llegados debido al difícil viaje y a que viven en entornos de grupos llenos de gente donde las infecciones se extienden rápidamente. Seis más personas que viven en el albergue – cuatro niños y dos adultos – fueron hospitalizados por enfermedades esta semana, de acuerdo al Departamento de Bomberos de Chicago.
“Lamentamos la muerte de Jean Carlos Martínez Rivero y compartimos nuestas condolencias con su familia. Pedimos responsabilidad y total transparencia en los resultados de las investigaciones sobre su muerte y la gestión del refugio para migrantes donde vivía, por parte de Favorite Healthcare Staffing, una auditoría de todos los refugios para migrantes y un mayor acceso a los refugios por parte de defensores voluntarios y proveedores de servicios”, dijo Illinois Lation Agenda (ILA). “Los albergues deberían ser un lugar seguro para los migrantes, ya que estos buscan oportunidades de hacer de Chicago su hogar. Nos mantenemos firmes en demandar justicia y responsabilidad y continuaremos abogando porque los líderes de nuestra ciudad hagan una prioridad la seguridad y dignidad de todos nuestros nuevos vecinos que ponen su confianza en los administradores del albergue”.
Según la ciudad de Chicago, se está llevando a cabo una investigación y cualquier cambio en los protocolos de seguridad para el personal se realizará en función de los hallazgos. Muchos recién llegados reciben vacunas durante su encuentro médico programado en la clínica de migrantes Cook County Health Belmont, así como en otros Centros de Salud Calificados a Nivel Federal (FQHCs) y otros proveedores que cuidan a los recién llegados. El Departamento de Salud Pública de Chicago continúa apoyando la atención en refugios a través de sus socios, incluidos exámenes de detección en el lugar, prevención de infecciones y vacunas.