Al llegar la temporada de otoño, entre las hojas cambiando de color y los juegos de futbol americano, hay un invitado no deseado que persiste en nuestra comunidad: el COVID-19. Aunque los índices de infección se mantienen relativamente bajos en Chicago, el índice de hospitalizaciones por el COVID-19 sobrepasa a el de las hospitalizaciones por la influenza o el VSR, y la actividad viral en las aguas residuales que es monitoreada en todo el estado confirma que los casos de COVID-19 pueden estar aumentando.
Los CDC recomiendan obtener una vacuna contra el COVID-19 actualizada para el periodo de 2024-2025 para protegerse contra potencialmente enfermarse gravemente por las nuevas variantes del virus, resaltando que la protección otorgada por las vacunas disminuye con el paso del tiempo. Las vacunas que están disponibles en las farmacias de Chicago han sido formuladas para proteger en contra de la cepa JN.1 y sus variantes derivadas.
Esta temporada, le recomiendo a todos los miembros de nuestra comunidad Hispano-Latina a vacunarse en contra de la influenza, el VSR y el COVID-19, y a consultar con sus proveedores médicos sobre sus opciones. En Chicago, cada persona puede escoger entre una vacuna contra el COVID-19 de ARNm desarrollada por Pfizer o Moderna, o una vacuna contra el COVID-19 de subunidad proteica, no ARNm, desarrollada por Novavax. La opción de subunidad proteica ha sido desarrollada con la misma tecnología usada en algunas vacunas contra el VSR y la influenza.
Independientemente de que vacuna contra el COVID-19 escoja, vacunarse continúa siendo la mejor defensa contra enfermarse gravemente y la hospitalización para usted y sus seres queridos.
Esther E. Sciammarella, M.S., is the Executive Director of the Chicago Hispanic Health Coalition, a 501 (c) (3) non-profit organization she helped establish in 1991 as a multi-disciplinary membership organization. Its mission is to promote healthy behavior and prevent chronic disease in the Hispanic community.