Un test genético para mujeres que han sido diagnosticadas con las etapas tempranas de cáncer de mama puede predecir que pacientes se pueden saltar con seguridad la quimioterapia sin dañar sus oportunidades de derrotar a la enfermedad. Estos resultados prometedores resultan de un estudio reciente del National Cancer Institute publicado en la Revista de Medicina de la Nueva Inglaterra. Para el estudio, los investigadores usares un test de actividad de los genes llamado Oncotipo DX, el cual mide la actividad de los genes que controlan el crecimiento de la células, para clasificar 10,253 mujeres diagnosticadas con cáncer de mama en riesgo de recurrencia del cáncer bajo, intermedio o alto.
Los científicos escogieron al azar mujeres en el grupo intermedio para que recibieran terapia hormonal sola o con quimio. El grupo de alto riesgo recibió tanto quimio como terapia hormonal. Los resultados de estas ramas del estudio aún no se tienen, porque se están haciendo aún. Sin embargo, los resultados muestran que las mujeres en el grupo de bajo riesgo que no recibieron ninguna quimio han tenido menos del 1 por ciento de que su cáncer regrese en cualquier otro lugar de su cuerpo después de cinco años. Según Clifford A. Hudis, MD, Jefe del Servicio de Medicina de Cáncer de Mama en el Centro Cancerológico Memorial Sloan Kettering, un experto independiente que comentó sobre el reporte, usando un test genético en esta forma “nos permite enfocar nuestra quimioterapia más a los pacientes de alto riesgo que son los que se benefician.” El test cuesta $4,175, pero está cubierto por Medicare y muchas otras compañías de seguros de cuidados de salud. Adicionalmente, otros test de actividad genética que identifican a las pacientes de cáncer de mama en las primeras etapas que pueden pasar la quimio están ahora disponibles.