Investigaciones muestran que ciertas comidas “cómodas” liberan la misma clase de químicos cerebrales que las altamente adictivas drogas opioides. El Dr. Bradley Nelson, autor del libro “The Emotion Code” [El Código de la Emoción], nos da cinco consejos para ayudar a la gente a combatir la “alimentación emocional” justo a tiempo para primavera y verano.
Descubre Que te Provoca Comer: Pasa algún tiempo pensando sobre eventos en tu pasado que te entristecieron o te hicieron sentir ansioso. “Date cuenta que pasa por tu mente que te provoca querer comer emocionalmente. Con esto ganas la mitad de la batalla”.
Un Diario de Comidas y Sentimientos: Escribe no solo lo que estás comiendo, sino lo que estás pensando y sintiendo al mismo tiempo. ¿Cuál fue la principal emoción que hizo que comieras ese cuenco entero de papas fritas o un carton complete de helado? Conocer la relación es clave para romper los malos hábitos.
Desarrolla una Estrategia: Crea un plan sobre como responder la próxima vez que te veas tentado a comer de más. El Dr. Nelson sugiere un método sencillo: Pon una liga en tu muñeca y cuando sientas la urgencia de comer lo que sabes no deberías, estírala y suéltala sobre tu muñeca para ayudarte a hacer desaparecer la emoción que te está haciendo comer.
Has Ejercicio Diariamente: ¿Demasiado ocupado para hacer ejercicio? No hay excusa! “Encuentra la forma de hacer ejercicio dentro de tus tareas diarias. Enfrenta el reto del impiar la casa entera en la mitad del tiempo normal y sudarás con barrir y sacudir de un cuarto a otro”.
Habla Más, Come Menos: Este es un truco que el Dr. Nelson recomienda: Cuando salgas a comer con los amigos, ve preparado con historias que contar para que hables más. Como resultado, inevitablemente comerás más lentamente. Come tu ensalada primero para satisfacerte con alimentos saludables en vez de alimentos azucarados y grasosos. Recuerda las necesidades de tu cuerpo y respétalas.