Por: Ashmar Mandou
El Acta Vivienda Segura para Familias (H.W. 1690, ahora titulada CO Alerts Act) fue aprobada el martes en la Cámara de Representantes de E.U. con apoyo bipartisano. El proyecto, presentado en marzo por el Congresista Jesús “Chuy” García (IL-04) y Joe Cunningham (SC-010) proveerá fondos para detectores de monóxido de carbón en unidades habitacionales subsidiadas federalmente.
“Hoy, aunque votamos por este proyecto en el piso de la Cámara de Representantes, sigo pensando en las 13 personas que han muerto envenenadas con monóxido de carbón en la vivienda pública federal desde el 2003. Estas tragedias pudieron evitarse con un detector barato. Ninguna familia en Estados Unidos debería vivir con el temor de quedar envenenado mientas duerme y preocuparse de si va a despertar de nuevo. El Acta CO Alerts es un ejemplo de lo que el Congreso puede lograr cuando trabajamos de forma bipartisana, en ambas cámaras, con políticas de sentido común. Exhorto a mis colegas en el Senado a apoyar y aprobar esta legislación que salva vidas, antes de que lleguen los fríos meses de invierno”, dijo el Congresista García.
“En los pocos meses que he estado en el Congreso, por lo menos cuatro estadounidenses han muerto, de Columbia a Detroit, en complejos de vivienda pública por envenenamiento de monóxido de carbón,. Cada una de estas muertes se pudo haber evitado”, dijo el Congresista Cunningham. “Me siento orgulloso de que la Cámara haya dado hoy este paso para prevenir muertes sin sentido en el futuro, aprobando el H.R. 1690, el Acta CO Alerts”.
El Acta CO Alerts proveerá $305 millones de dólares en tres años al Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano para que coloque detectores de monóxido de carbón en las unidades de vivienda pública. Esta legislación evitará muertes innecesarias por envenenamiento de monóxido de carbón en millones de hogares del país. Casi cinco millones de familias reciben ayuda HUD de renta en Estados Unidos. La mayoría de ellos son ancianos, discapacitados y tienen niños pequeños. De acuerdo a los Centros para el Control de Enfermedades, 50 mil personas por año se enferman por envenenamiento de monóxido de carbón y más de 400 mueren cada año.