Cuando una persona con problemas de salud mental llama al 911, no siempre necesita el hospital – pero son regularmente llevados a una sala de emergencia en vez de al centro de salud mental que requieren. La Senadora Estatal Melinda Bush (D-Grayslake) conduce una medida que cambiaría esto, al permitir que los trabajadores de EMS lleven a los pacientes donde más se beneficien. Actualmente los proveedores de EMS solo pueden llevar a un paciente a una sala de emergencia, donde un médico profesional puede determinar si sería más adecuado enviarlo a un centro de salud mental. Para evitar el paso extra y muchas veces innecesariamente costoso, el Proyecto 693 del Senado permite el transporte directo a la asistencia apropiada.
Los trabajadores de EMS tendrían la oportunidad de pedir no ir al hospital si el paciente no tiene heridas o una enfermedad que sea amenaza de muerte, si no está bajo la influencia de drogas o alcohol y no tiene una necesidad imperiante de ser visto en el departamento de emergencias. Pacientes con problemas de conducta ponen cada vez más presión en los departamentos de emergencia. Muchas veces ocupan las salas de emergencia en forma desproporcionada debido al limitado número de camas para pacientes internos de psiquiatría, recursos comunitarios limitados o la falta de acceso a la atención médica. Esto no solo es una carga en salas de emergencia sobrepobladas – especialmente en la era delCOVID-19 – también puede ser financieramente engorroso. La medida fue aprobada el martes por el Comité Senatorial de Salud Mental y Conductual y pasa al Senado en pleno para su consideración.